Como vehículo aún conceptual, se permite ciertos excesos en su diseño, mezclando una estética café racer con un sabor retro a competición, algo que solo se acentúa más con las tres decoraciones disponibles: Lotus, Caterham y Martini.
A pesar del aspecto vintage, cuenta con tecnología actual, empleando titanio y fibra de carbono para diversos elementos del carenado y del chasis, lo que le ayuda a tener un peso bastante contenido, solo 181 kilos.
Esa ligereza alcanza una nueva dimensión cuando sabemos que entrega una potencia de 200 CV, extraídos de bloque V2 1.2 a 75º refrigerado por agua.
Para frenar se sirve de un doble disco delantero de 320 mm mordido por pinzas de cuatro pistones y uno trasero de 220 mm con pinzas de dos pistones.En realidad sigue en forma de prototipo esta es la primera motocicleta de Lotus, la C-01, desarrollada por Kodewa Performance y Holzer Gruppe.
Se producirá una serie limitada de únicamente cien unidades.